En el ámbito empresarial y de negocios, Latinoamérica ha sido uno de los grandes proveedores de materias primas, y de fuerza de trabajo a nivel mundial. Por supuesto, en estas latitudes el talento sobra, pero existen una serie de factores que la región debe enfrentar y superar.
Uno de los grandes obstáculos que es preciso romper en este continente es la percepción de que muchos países de habla hispana o portuguesa sólo pueden ser maquiladores, y no creadores.
¿Cómo dar ese paso y lograr una evolución en la creación de empresas locales que se proyecten hacia el mercado globalizado? Cristopher Serrato, Fundador y CEO de Inmediatum, nos da una pista.
“Creo que en América Latina estamos en un punto de quiebre importante. Somos, a nivel continental, una población de más de 600 millones de personas, con productos internos brutos bastante significativos, y sobre todo con mucho talento. El mundo ve a América Latina como el maquilador o la producción a un bajo costo; sin embargo, esto se está transformando. En muchas ciudades de Latinoamérica, en México, lo que es Guadalajara por ejemplo, hoy día se exporta mucha más propiedad intelectual que tequila; y esto está hablando de un cambio de paradigma en el sentido de que ya se deja de maquilar para empezar a crear, y es ahí donde en América Latina tiene una oportunidad muy grande para crecer como región. El hecho de podernos reconocer como región en América Latina, tal cual pasa en la Unión Europea, en Asia, que literalmente se reconocen como una región, nos permitirá unir esfuerzos con Colombia, con Guatemala, con El Salvador, con Brasil y no vernos como competencia. Como región podemos crecer juntos”, comentó Cristopher Serrato para Expandr.
La unión hace la fuerza; pero no sólo eso va a permitir el cambio. Entre el querer y el hacer existen procesos que nos llevarán al logro de los objetivos. Esta es la visión de Inmediatum, empresa mexicana de innovación que pone énfasis en el manejo de las herramientas con una visión humana, es decir, el uso de la tecnología es un camino para empoderar a las personas.
“Nuestra percepción de una empresa global no es la empresa que tiene oficinas en todo el mundo, una empresa nos es global porque tenga maquilas en diferentes partes del mundo, más bien eso yo lo vería como una empresa colonizadora. La empresa global es la que puede entregar valor en cualquier parte del mundo; y eso puede ser a través de diferentes esquemas tecnológicos, pero sobre todo con una estructura que le permita ofrecer un servicio de alta calidad y que entregue valor en cualquier parte del mundo. No importa ni el idioma, ni el horario, entonces te conviertes en una empresa global. Se requiere talento, personas que cuenten con esta visión global: ¿lo que hago realmente tiene un impacto, realmente tiene valor, realmente sirve?”.
Esto nos lleva hacia otro paradigma no menos importante: la fuga de talentos latinos que, ante la falta de oportunidad de crecimiento, se ven obligados a salir de su entorno para crecer.
“Esto también va de la mano de que las personas no tengan que desplazarse, cambiar el epicentro. No solo en las grandes urbes se pruducen las grandes cosas, porque en realidad el talento no nada más está en las grandes urbes. Inlcuso la mayoría de las personas de las grandes urbes son migrantes porque ahí es donde está el trabajo. Las empresas globales permiten que se cambien los epicentros y que ahora las personas puedan trabajar desde casa, o sin tener que salir de sus ciudades de origen, lo cual también genera una derrama económica distinta. Hoy día podemos tener talentos, desde pequeños puertos que realmente se enfocan a una industria turística, por ejemplo, hasta equipos de ingeniería que están trabajando para empresas de la lista 500 de -Fortune-. Entonces creo que ese es el resignificado de la empresa global y del impacto que se puede tener, y que como región en temas de toda Latinoamérica podemos hacer comunidad y compartir. Nosotros buscamos poder compartir con nuestros clientes esa experiencia que tenemos para ayudarles a que su transición hacia el mercado global sea menos riesgosa. Es tener un guía, como un sherpa que te está ayudando a recorrer un camino, que ya está experimentado, que ya pasó por ese proceso varias veces, con diferentes negocios”.
La guía adecuada. El proceso justo. El aprovechamiento de la tecnología, y una visión humana orientada hacia lo colectivo; estas son algunas claves que harán de Latinoamérica un referente de cara al futuro.
